Hay tanta luz como oscuridad, salvo que neguemos la segunda y nos dediquemos a perseguir, mentir, lucrar.
Nos mostraron muchas películas donde el amor era una pareja super romántica que solo vivía situaciones increíbles.
Quienes las crearon recibieron millones de dólares para que terminen (casi) siempre "felices".
Le hablé a mi anterior versión:
"Pensaste que era cierto, deseaste algo igual de extraordinario y te volviste dependiente.
Lo siento, eso no es real y toca limpiar tu mente".
Si la mayoría no es auto-suficiente, mantendrá a quienes viven como quieren.
Una pareja en el siglo XXI representa acuerdos, reglas y gastos que sostienen un modelo general de contratos.
Familia, casa, citas, jardín, escuela, supermercados, bancos, políticos, empresarios, iglesias, Estados.
El amor no depende de alguien externo sino de aceptar dónde estamos y elegir lo que hacemos.
Lo trascendental no se puede medir ni encontrar en algo.
Intentaste contar granos de arena, estrellas, hojas en árboles o los pelos de un gato?
Imaginaste cuántas chances hay de que exista tu vida y de tener alguien al lado?

Son tan pocas que es imposible de calcular. La vida humana por sí misma es un verdadero milagro.
Dime, entonces, qué tanto te amas? Eso es lo que podrás amar a los demás y lo que valorarás que te amen.
La mayoría confunde deseos que nacen en sus miedos con amor, cuando son literalmente opuestos.
El amor es unión y aceptación; trasciende pensamientos.